La
artista checa Helena Kadlikova pasó 3 meses con Michael en Neverland. Habló
sobre el arte con Michael, cenaron juntos y jugo con sus hijos. Esta es la
primera vez que se ha hablado de esto a los medios de comunicación (la revista
Cosmopolitan). Que Helena viviera con Michael durante 3 meses se ve un poco
como un cuento de hadas… ¿Cómo ocurrió todo?
“En
definitiva no fue fácil”, dijo Helen Kadlčíková. Su viaje a la sede del famoso
cantante comenzó en 2001. La primera etapa mientras que Helena estaba en su
hotel en Londres, consistía en llegar a Michael para que viera los cuadros que
había pintado. Después de discutir con los guardaespaldas de Michael el acuerdo
para que se conocieran. Michael le encargo algunas pinturas. Helena sin embargo,
puso una condición, no quería dinero solo quería ir a Neverland. Michael estuvo
de acuerdo y en un pedazo de papel con el logotipo de Peter Pan, escribió un
número de contacto y Michael pidió que se pusiera en contacto con su asistente
Evvy Tavaszi.
2
años pasaron “Fue muy difícil que todas las cosas concordaran. El problema fue
con el Visado. Michael me envió una carta invitación firmada por fax, pero yo
necesitaba alguna prueba más para llevar a la Embajada. Así que lo seguí a
Berlín en 2002 donde fue sólo de visita para que pudiera tomar una foto con él.” En otro artículo de Helena dice que cuando conoció a Michael en el hotel
que acababa de levantar y estaba medio dormido y en pijama y esta fue la foto
que ella utilizo para obtener su visado!. Helena presento las fotos de Berlín
a los funcionarios de Praga y aunque al principio sospecharon, ellos le
tramitaron el pasaporte sin problemas. Estaba deseosa de ir a Neverland y sólo
se lo creyó cuando tuvo su visado para California. Ella tenía permiso para una
estancia de 2 semanas pero se quedó por tres meses.
EL
GOLDEN GATE
En
septiembre de Helena voló desde el aeropuerto Ruzyne de Praga con un regalo
para Michael, un libro sobre castillos y palacios checos. Ella fue recibida por
LA en la limusina de Michael para llevarla a Neverland. “No sabía a dónde iba a
ir, qué iba a pasar. De repente se abrió la puerta y tuve que firmar un
documento que prohibía hacer fotos o revelar información. A continuación, me
condujeron a través de otra puerta, había cosas doradas, música y que me subió
la adrenalina”. A su llegada Helena espero en la sala de estar del edificio
principal, que estaba lleno de antigüedades y esculturas, pero dijo que no le
resultaba muy acogedor. Después de un momento fue llevada a una de las 4
suites.
A
pesar de que el rancho tiene más de 1000 hectáreas el edificio para los
huéspedes sólo se encuentra veinte metros de la casa de Michael donde vivía con
sus hijos. La entrada estaba protegida por un código, que más tarde fue
revelado a Helena. Jackson vivía en privado a mi derecha. “Allí no estaba
permitido caminar”. Dijo Helen, que disfrutaba de su lujosa casa de huéspedes.
Era de un estilo rústico. Podría ser comparada con cualquier suite presidencial”,
dijo.
Aunque
Michael no estaba allí cuando llego, le dijeron que estaría allí por la noche y
que la buscaría porque al día siguiente tenía que salir para Canadá durante 3
días. “Estaba casi dormida cuando escuche que alguien está intentando entrar en
mi habitación. Era Michael. Dije que era yo, pero siguió dando golpes y entro
en el apartamento de al lado. Una hora más tarde sonó el teléfono, y Michael de
nuevo, esta Pedro pregunto? No, creo que está en el apartamento de al lado,
dije con una sonrisa. (Creo que Michael estaba gastándome una broma).
Tras
el regreso de Michael de Canadá, Helena finalmente pudo comenzar a pintar. “Él
me dió fotos de los niños de Prince, Paris y Príncipe II. (que Michael mismo
fotografió)” y pintó sus retratos. “Él me dio absoluta libertad pero quería que
le dibujara allí una luciérnaga”. “Tenían que resolver una cuestión legal”,
dice la artista. Durante su estancia Helena completo tres obras antes de
marcharse.
Helena
no siempre pintaba. Michael le proporcionaba siempre un coche con un chofer
para viajar a Santa Bárbara y a otros lugares. Le gustaba el Zoo, la feria y el
estudio de grabación de Michael. A veces con los hijos de Michael o con los
hijos de sus primos, “Rodábamos juntos por el patio. Además, Michael nos
llevaba en el coche, pero terminábamos cayendo en una cama de flores. Había un
cine en él nos proyectaban películas. La película que se iba a proyectar cada
noche estaba siempre anunciada en el tablón de anuncios de la cocina”, recuerda
Helen.
COCINA
La
cocina era el centro principal de Neverland. Aquí todos comen juntos, discuten,
miraban la televisión y se daban los planes para el día... “Por la mañana,
levantarse alrededor de las diez, y luego ir a la cocina para el desayuno.
Michael a menudo entraba a la cocina en busca de alimentos. A veces me daba un
vaso de bebida verde, algo muy saludable. Bueno no era muy bueno pero solía
comer lo que comían todos los demás” Helena generalmente comía el desayuno con
sus hijos -..y podía permitirme cualquier cosa, lo que más me apetecía....
Desde el desayuno caliente Inglés con muchos tipos de pan, copos de maíz a una
gran cantidad de fruta. “Luego me iba a enseñar a los niños por la tarde (sobre
todo a pintar) y jugaba con ellos. La cena fue una selección de cuatro platos.
Aunque Michael a menudo afirmaba que era vegetariano, no podía evitar la carne
de pavo. Si alguien se quedaba con hambre podía pedir algo más a los chefs.”
PIJAMAS
Elena
vio a Michael Jackson casi todos los días. Mayoría de las veces estaba en
pijama. “Él usó un perfume muy fuerte, por lo que siempre supe que iba a venir,
o dónde estaba. Solíamos hacer batallas de ropa, y a veces luchábamos juntos y
mi ropa interior que llevaba en las manos tenía todo su olor”, dice Helen.
(Esto fue lo mejor de mis recuerdos, cuando jugaba a luchar juntos, Helena aún
podía oler a Michael en su ropa!)
La
oportunidad de quedarse con el rey del pop a solas por un momento era mínima
-porque siempre había alguien con él. Sin embargo, Helen tuvo varios momentos
inolvidables. “A veces se había reunido en su biblioteca. Hablábamos de arte.
Sobre los cuadros que había pintado. Michael le gustaba los clásicos, la
abstracción no era para él. También a menudo hablaba de su primera esposa, Lisa
M. Presley. Era evidente que todavía tenían alguna relación, lo podía
percibir y agregó que Jackson fue siempre muy educado, un hombre sensible con
un gran sentido del humor, alguien que no podía decir que no.” Mientras Helena estuvo
en Neverland fue su cumpleaños, Michael tenía un pastel. Comimos el pastel por
la mañana y Michael tenía una sonrisa picarona. Para ella, no fue un famoso cantante,
simplemente fue Michael.
REDADA
DE LA POLICIA EN SU CASA
En
Neverland, se podía escuchar todo el día música por los altavoces camuflados,
también en los árboles se podia escuchar el canto de los pájaros, y Helena
conoció a la madre Michael y la cantante y actriz Lisa Minelli. “Yo estaba
tomando café en la cocina, sentada junto a Michael, cuando Lisa llegó. Me pase
todo el día con su asistente y el perro de Lisa. Michael tenía miedo de él”,
dijo Helena.
En
el último mes de su estancia con los hijos, Michael se fue a Las Vegas. Lo vio
por última vez en Neverland. “Cuando se fue, todo era muy aburrido, me gustaba
cuando él se encontraba allí.”
La
estancia de Helen se vio interrumpida por las redadas policiales en la casa de
Michael, seguida de un juicio prolongado. El cantante fue acusado de abusar
sexualmente de niños. La policía allanó el rancho una semana antes de su
partida. “A menudo hay helicópteros sobrevolando, la gente tomó fotografías de
la finca. Una vez una mañana, escuchó un helicóptero, y de que un hombre le
gritó algo a través del altavoz. En Neverland, nadie sabía lo que estaba
sucediendo. Estaban en estado de shock. Pronto llegó un montón de policías que
cortaron los juguetes de los niños, los viejos libros de Michael, las cosas de
última hora. Parecía que lo estaban haciendo a propósito. La policía entró en
mi habitación y me preguntó varias cuestiones”, dice Helen, fue un momento
dramático. Por la tarde me senté en la cocina viendo la televisión y descubrí
lo que realmente estaba sucediendo. Unos días más tarde, a principios de
diciembre, me fui.
“En
Neverland todavía tengo algunas cosas, como el equipo de pintura. En enero,
pensé volver para recuperarlo”, dijo Helena. No fue así.
Michael
vio a Helena de nuevo sólo después de tres años en Londres. Eligió las otras
imágenes creadas para él, mientras tanto, y acordaron volver a reunirse.
Esta fue la nota que le dejo Michael con su teléfono
Uno de los cuadros que pinto para Michael
Prince y Paris