‘Xscape’: Un nuevo rescate del arsenal de canciones de
Michael Jackson
Michael Jackson era un tipo perfeccionista,
cuasiobsesivo compulsivo e incluso hiperbólico a la hora de trabajar en
su obra. Cuentan varias leyendas que para algunos de sus discos grabó
hasta 70 canciones, sin contar que cada pieza la registraba docenas de
veces, en busca de la perfección.
Cuando el artista
murió –hace poco menos de cinco años– estaban claras varias cosas, como
que su recuerdo no descansaría en la corte, sino hasta años después, y
que el tesoro que es su patrimonio no dejaría nunca de ser explotado en
manos de sus familiares y de las compañías que lo administran.
De hecho, cuatro días después de su muerte salió a la venta The Collection, una caja con casi todos los discos de Jackson. Aunque ese lanzamiento
estaba presupuestado desde antes de su muerte, fue apenas el primero de
varios compilados que salieron ese mismo año.
Discos de remixes , como The Stripped Mixes y The Remixed Suite, así como recopilados de distintas épocas, como Hello World: The Motown Solo Collection, o el de grandes éxitos The Definitive Collection, fueron algunos de los títulos que se pusieron a la venta en los meses siguientes a su muerte.
En el 2009 –el año de su muerte–, Michael Jackson
fue el artista que más música movió en el mercado (todavía se mantiene
como uno de los artistas fallecidos que más ingresos genera), pero
pocos de esos lanzamientos contenían algunas de las muchas canciones
inéditas que los fans de corazón esperaban.
A finales
de octubre del 2009, la maquinaria detrás del nombre de Jackson estrenó
en cines de todo el planeta el documental y concierto This Is It, acompañado de una banda sonora repartida en un doble disco, la cual incluyó seis grabaciones previamente desconocidas.
Los fans guardaron sus expectativas de escuchar otros temas inéditos hasta diciembre del 2010, cuando se editó Michael, el primer álbum póstumo compuesto completamente por canciones de Jackson que estuvieron escondidas.
Empero, la recepción –del público y de la crítica– para con Michael
fue agridulce. Eso sí, los críticos no negaron que, comparado al
escepticismo previo, el disco era mejor de lo que muchos esperaban.
En general, la opinión pública resaltó el talento de Jackson que
espiraban las canciones en el disco, sin desestimar el hecho de que –de
estar con vida– el músico no hubiese lanzado un álbum de ese tipo.
El recuerdo de Michael Jackson rápido se movió hacia otros terrenos, más allá de los discos (salvo una reedición de Bad en su 25 aniversario), abarcando desde espectáculos con el Circo del Sol hasta todo tipo de mercadería oficial.
No obstante, las grabaciones inéditas del artista fueron tantas que
todavía faltan muchísimos álbumes póstumos más. De eso se aprovechó L.A.
Reid, presidente de Epic Records y productor ejecutivo de Xscape, una nueva producción de material inédito de Jackson que saldrá a la venta el 13 de mayo.
Remozado.
Quizá cientos archivos de grabación de Michael Jackson que el público
no conoce están esparcidos a lo largo del sur de California, en Estados
Unidos. No pocas bodegas albergan los archivos, al igual que su
guardarropa, sus carros y joyería.
El primer paso
para hacer el disco fue escarbar entre esos audios, para luego indexar y
seleccionar, partiendo de un principio básico: que Jackson cantara la
canción varias veces, de principio a fin, porque ese era el único
indicador que Reid podía pensar que significaba que el artista amaba los
temas.
24 canciones se escogieron de entre los archivos, de las cuales solo ocho lograron formar parte de Xscape. Las vocales originales se grabaron entre 1983 y 1999, abarcando las sesiones en estudio de discos como Bad (1987) e Invincible (2001).
La idea era tomar esas grabaciones, poner la voz en
el centro y al frente, y producir música que respetara la naturaleza
vocal y que, al mismo tiempo, se aproximara a un sonido contemporáneo,
confeccionado por varios de los productores más relevantes del momento.
Timbaland (quien ha producido desde discos de Justin Timberlake hasta
Beyoncé) fue uno de los elegidos. También se sumaron el dúo noruego de
productores Stargate (Rihanna, Ne-Yo), y los estadounidenses Rodney
Jerkins (quien trabajó con Jackson en Invincible) y Jerome Harmon (Chris Brown, Jay-Z).
Justin Timberlake canta en Love Never Felt So Good, una canción que Jackson y Paul Anka escribieron en 1983 y de la cual solo se había lanzado un demo. De hecho, todas las canciones habían llegado a manos de fans –de
alguna u otra manera– mediante filtros en la web, solo que sin el
maquillaje ni la postura oficial que traen en Xscape.
La prensa internacional tuvo acceso a fiestas en las que se reprodujo
el disco, y las opiniones han sido un poco más cálidas que las de
proyectos similares en el pasado.
The Guardian publicó que es un disco con canciones que merecen ser escuchadas, mientras que Billboard aseguró que el álbum es exitoso en sonar simplemente como suena la música de Jackson.
“Es música llena de alegría y desesperación, casi sin distinción entre
ambos. El disco transporta el espíritu del fallecido genio pop desde el
pasado y hasta el futuro, el lugar en el que a él le hubiera gustado que
viviera su música”, dijo Billboard.
A Reid, por su parte, el proyecto le sirvió para retomar confianza en
su puesto en Epic Records, o incluso para respaldarlo, como dijo en
entrevista con Billboard. ¿Será este un capricho del productor o una obra necesaria para los fans?
Él –como fan– está satisfecho. Luego de trabajar con
Jackson y de mantener una relación profesional durante años, Reid se
quedó con ganas de ayudarle al artista en su último lanzamiento, el cual
no se pudo concretar antes de su muerte.
El
productor recuerda que, entonces, Jackson le dijo: “No quiero hacer
ningún otro éxito. No quiero solo hacer otro disco. Quiero hacer algo
grandioso. Si no puede ser grandioso y masivo, si no te comprometes
conmigo, entonces no deberíamos hacerlo”. El mundo dirá si Xscape tiene esas cualidades.
Fuente:nacion.com