Miles de fans de Michael Jackson esperaban en hoteles y negocios durante
el fin de semana, deseando dar un vistazo al esquivo cantante, pero un
niño de 8 años que sufre de un tumor cerebral, consiguió una invitación
especial para conocer a la superestrella.
Leroy Robinson, conocido entre sus amigos como "Huggy", fue llevado por una ambulancia desde el Hospital de Niños al concierto del viernes del Victory Tour y luego al hotel de Jackson después del show, temprano en la mañana, por 10 minutos emocionantes.
"Todos en la habitación, incluyendo a los guardias de seguridad, tenían escalofríos corriendo por su columna", dijo Norman Winter, jefe de relaciones públicas de Jackson.
"Michael hace esta clase de cosas todo el tiempo, pero no creo haberlo visto tan conmovido por un jovencito. Es un niño muy especial". dijo Winter.
Los promotores del concierto le dieron a Leroy entradas para el concierto del viernes y prometieron a su familia un viaje en limusina al estadio y un encuentro antes del show en el backstage.
Pero debido a una confusión con la limusina, Leroy, vestido en un traje de Michael, llegó 10 minutos después de comenzado el show y perdió la oportunidad de conocer al cantante.
Leroy había estado cansado e irritable durante el viaje, pero en el momento en que una enfermera acomodó su almohada en el concierto, su actitud cambió.
"Es Michael. No puedo creerlo. Estoy aquí realmente", dijo.
Pero su fascinación pronto desapareció cuando el calor y el ruido del estadio le dieron dolor de cabeza. Justo cuando estaba listo para irse en la ambulancia, Winter envió un mensaje donde decía que Michael quería conocerlo en su habitación del hotel, dijo el Dr. Richard Guy LeMere.
"Usted sabe, fue realmente emocionante. Michael Jackson fue muy sincero, hablando al pequeño. No fue distante en absoluto", dijo.
Jackson firmó el guante blanco de Leroy, dijo LeMere, antes de que el niño y su familia se fueran. El padre del niño, dijo que Jackson pidió a la familia, mantenerlo informado de la condición de Leroy.
"Nunca lo vi más feliz", dijo Robinson.
Y después de dormir la mayoría del sábado, Leroy despertó, comió dos panqueques y pidió más.
"Él realmente está mejorando desde que vio a Michael", dijo su padre. "Le han sacado la intravenosa de su brazo y sólo se la van a poner para su medicina, su espíritu está mucho más elevado".
Fuente:http://mjhideout.com/