Extracto de 'Behind The Mask' por el Dr. Patrick Treacy | Excerpt from 'Behind The Mask' by Dr. Patrick Treacy

De acuerdo con el nuevo libro escrito por el Dr. Patrick Treacy 'Behind The Mask', médico irlandés de Michael. El sueño de Michael era hacer de Irlanda su lugar de residencia. 

El libro cuenta cómo después de un largo verano, el rey del pop confió a su amigo, el Dr. Patrick Treacy, que había vuelto a redescubrir su felicidad allí. También se lee que Michael Jackson estaba muy feliz de explorar la campiña irlandesa a caballo, y quería desesperadamente criar a sus hijos en Irlanda.

Tras su absolución por cargos de abuso de menores en 2005, Michael decidió vivir en el famosa cuidad Rosemount en Westmeath durante seis meses con su familia. 

(…) Una noche de verano, el médico cuenta que su cliente mundialmente famoso le confió mientras tomaban una copa de vino: “Patrick, me encanta Irlanda, y sería un gran lugar para criar a mis  hijos. Tenemos la oportunidad de hacer un montón de cosas juntos aquí. Estoy trabajando en ello. Sólo tengo que ponerme de vuelta por ahí,  ordenar mis finanzas, y voy a establecer mi hogar aquí”.

“Michael dijo que él quería que sus hijos tuvieran privacidad mientras estaban creciendo”, continúa en el libro. “Él dijo que estaba feliz más de lo que había estado en mucho tiempo y que le gustaba la vida rural en Irlanda, paseando por las colinas a caballo con su familia. Dijo que dormían como troncos, tan pronto como colocaban sus cabezas en la almohada, debido a que todo el aire fresco del campo”.

(…) El Dr. Patrick Treacy recuerda su sorpresa cuando el hombre más reconocido del planeta se presentó ante él:

“Hola doctor Treacy - Soy Michael Jackson. He oído hablar mucho de usted y me gustaría llegar a ser su paciente”.

El Dr. Treacy añade:

“Ocurrió tan rápido que yo estaba totalmente en show. Él era la última persona que esperaba ver atravesar la puerta. Michael era un poco más alto de lo que esperaba: delgado, pero no demasiado. Llevaba un sombrero de fieltro negro, con el pelo rizado atada en una coleta y tenía una sonrisa tan contagiosa que era imposible no simpatizarte. Su chaqueta estaba hecha de aterciopelo negro y un jersey blanco de cuello en V ajustado”.

En el consultorio discutieron sobre sobre un procedimiento cosmético para su cara, el Dr. Treacy confiesa no podía creer lo que presenciaba cuando Michael Jackson se quitó sus gafas de sol  colocó y su fedora en su escritorio. “Fue un momento surrealista”, escribe. “Yo sabía que probablemente no era el mismo sombrero que usaba, o lanzaba con júbilo en el aire al final de un concierto, pero eso era lo que se sentía. Me hubiera encantado decirle a alguien acerca de mi encontró con  la estrella, pero, por supuesto, no pude. Después, sentí el impulso de llamar a mi hermano Sean, pero el sentido común prevaleció”.

Aunque él no revela exactamente lo que Michael había hecho en Ailesbury en sus memorias, Treacy admite estar desconcertado por el color de piel de Michael y él insiste en que el cantante de "Black or White" estaba diciendo la verdad cuando a su enfermedad vitíligo la cual sufría por años. Recuerda como MJ levantó su camisa para revelar el verdadero alcance de la condición crónica de su piel durante una consulta, Treacy dice:

“Yo estaba bastante sorprendido de ver la extensión de su enfermedad. La condición cubría la mayor parte de su cuerpo, haciéndome pensar que la había tenido durante años. Me dijo que cuando era más joven, había tratado de ocultar su enfermedad, ya que consideró que sus fans no escucharían su música si él no aparecía siempre perfecto. Inicialmente, trató de cubrir las manchas blancas con maquillaje oscuro, pero a medida que pasaba el tiempo, y la enfermedad avanzaba, se hizo más fácil para despigmentar las pequeñas manchas negras que quedan en la cara, cuello y manos. Cuando finalmente reunió coraje para decirle al mundo de su enfermedad, se consideró como una mentira, una excusa para cambiar su color de piel. Me sentí muy mal por él”.

(...) Cuenta como se convirtieron en amigos:

“Cuando los largos días de verano habían disminuido, Michael y yo habíamos caído en una rutina de charlar constantemente, a menudo durante una hora o más, antes de comenzar cualquier tratamiento. Él me llamaba casi todos los días por teléfono, y yo esperaba con gran interés nuestras conversaciones. Hubo momentos en que sentía como Michael estaba solo y necesitaba un amigo cercano con quien hablar. ‘No me gusta envejecer, quisiera quedarse en Irlanda para siempre para que me mantengas joven’ dijo”.

Al cabo de seis meses productivos en los estudios de grabación Paddy Dunning Grouse Logia, MJ estaba casi listo para retomar su carrera musical, y para dejar Irlanda por su duro invierno en Westmeath.

“Hacia finales de diciembre, Michael me llamó por teléfono para decirme que se iba de regreso a los Estados Unidos para huir del invierno Irlandés”, dice Treacy. “Más tarde se puso en contacto conmigo para decirme que estaba viviendo en Las Vegas y que quería volver a Irlanda tan pronto como pudiera. Michael me llama de vez en cuando para decirme lo mucho que él y los niños extrañaban Irlanda, y que volver. Los años pasaron y otros eventos comenzaron a presentarse en su vida, sin embargo. Nunca regresó a Irlanda”.

Al igual que millones de personas en todo el mundo, Treacy estaba viendo la televisión cuando la noticia de la repentina muerte de Michael se propago el 25 de junio de 2009 - apenas tres semanas antes de que se debió de hacer su regreso con entradas agotadas en el O2 Arena de Londres.

“Yo estaba en mi casa en Ballsbridge cuando un informe de noticias de última hora salió en la televisión”, recuerda. “Negué con la cabeza con incredulidad cuando el boletín de noticias dijo: ‘Acabamos de enterarnos de que Michael Jackson ha fallecido’”.

Tras revelarse que Michael había muerto de un ataque al corazón provocado por un cóctel de medicamentos recetados, incluyendo el anestésico propofol. Dr. Treacy revela cómo se quedó atormentado por un comentario de la estrella al decir que  "no sería sedado sin anestesiólogo" mientras discutían el control del dolor en la Clínica Ailesbury algunos años atrás.

“A pesar de que no significaban nada en ese momento, esas palabras resonarían fuerte en mi cabeza en muchas ocasiones en los años después de su muerte prematura”, escribe. “Durante el juicio en contra del culpable de su muerte, el Dr. Conrad Murray, los abogados afirmaron que Michael se había inyectado él  mismo la dosis de propofol después de haberle inyectado una dosis el Dr. Murray. Estoy totalmente en desacuerdo de lo que yo fui testigo aquella noche. Mi paciente me dijo abiertamente que él no sería sedado a menos que estuviera presente un anestesiólogo. Nunca vi ningún tipo de medicación en la casa de Michael, y nunca me pidió que le recetara nada más fuerte que píldoras de dieta”.

Durante del juicio a Murray por homicidio involuntario en el condado de Los Ángeles, lo que resultó en un veredicto de culpabilidad, el médico Irlandés de Michael fue interrogado por la policía de Los Ángeles - pero nunca fue llamado a testificar. Hablando sobre su decisión de llegar a los Estados en un intento por limpiar el nombre de Michael, Treacy dice:

“Decidí ir al funeral de Michael y visitar Neverland y claro presentar mis respetos y despedirse de él por última vez. Fue horrible para mí saber que, en mi experiencia, Michael no era un adicto a la medicina recetada y al ver su buen nombre empañado una vez más a nivel mundial. Sentí que el legado de Michael estaba siendo manchado y, como un amigo, esto me entristece”.

Seis años más después, mientras que los fans recuerdan a Michael como el mejor artista de todos los tiempos, el Dr. Treacy dice que todavía piensa en su amigo Michael como un padre maravilloso, al que una vez vio acostando a su pequeño hijo en la cama y  darle un beso de buenas noches. (...) “Había algo de extraordinario presenciar ese momento en una habitación con poca luz en el centro de la campiña irlandesa”, dice. “Yo siempre había pensado que Michael Jackson estaba en su elemento en el escenario, pero aquello era su elemento. Él era un padre cariñoso, muy querido por sus hijos, alguien muy alejado de lo que medios decían de él”.

El libro también comparte una conversación de teléfono del Dr. Patrick Treacy con Madiba. Michael Jackson le pidió a su médico irlandés que le ayudara a organizar "un gran concierto en Ruanda para todos los niños que sufrían de VIH" - y una vez incluso le puso al teléfono a Nelson Mandela en medio de una conversación con el objetivo de hacer realidad su sueño.

Durante una consulta memorable, Dr. Treacy recuerda al humanitario cantante pasarle el teléfono móvil y decir 'hola' a una voz familiar en el otro extremo.

“¡Habla  con él!” El Dr. Treacy relata lo que la estrella le dijo, en su nuevo libro. “Vamos, que es mi amigo. Él nos va a ayudar con el concierto en África”.

“Suspiré y tomé el teléfono. Apenas era el momento de comenzar a hablar con alguien que supuse era un promotor de conciertos.

‘Así que, ¿Nos vas a ayudar a Michael y a mi organizar este concierto en África?’ siguió, ‘Haremos todo lo posible aquí en Sudáfrica,’ respondió el hombre del teléfono. Pensando que era una broma, le pregunté al hombre quién era. ‘Soy Madiba’, se comenzó a reír. ‘¿Qué Madiba?’, Le contesté, torpemente. Michael tomó el teléfono justo cuando me di cuenta de que la voz tan distintiva del otro lado del teléfono era Nelson Mandela”.

Fuentes: The Irish Independent Newspaper y MJWN