miércoles, 2 de diciembre de 2015

Gwen Cariño: Michael Jackson la persona más generosa que he conocido | Gwen Honey: Michael Jackson the most generous person I've ever met



Comenzamos este mes de diciembre con esta hermosa HIStoria que demuestra una y mil veces más, lo magníficamente generoso que  era nuestro rey.


***

Gwen Cariño, gerente de relaciones públicas del Hotel Manila, dijo a Philippine Star, el 5 de julio de 2009, que tuvo como invitado especial a Michael Jackson durante una fiesta Navideña para huérfanos en Manila el 7 de diciembre - 1996.

MANILA, Philippines – Cuando era jefa de relaciones públicas del Hotel Manila, me asignaron dirigir la fiesta anual de navidad 'Orphan's Christmas Party', donde 300 niños de diferentes orfanatos alrededor de Metro Manila tuvieron un día de diversión y sorpresas. Fue uno de los proyectos más grandes de mi carrera y un reto para concentrarse en el trabajo un día antes del gran evento, a sabiendas de que Michael Jackson estaba en el hotel.
 
Dos noches antes, tuve la suerte de ser parte de su comité de bienvenida en el vestíbulo del hotel, junto con el resto del personal de relaciones públicas y ventas, y lo vi pasar!.


El día anterior, un hombre que decía ser el ayudante de Michael Jackson de Mamarao Productions llegó a la oficina. No recuerdo su nombre, pero él estaba en busca de la "persona responsable" y dijo que su jefe había leído el anuncio sobre el evento en los volantes que habíamos hecho circular en todas las habitaciones una semana antes. Michael quería saber cómo podía ayudar. Su ayudante hizo varios viajes desde la habitación de Michael y se acercó a la oficina varias veces, después de que le dimos nuestras sugerencias.

Michael ofreció llevar 300 bolsas con regalos y juguetes, dulces y chocolates. Pero después de recibir cerca de 50 patrocinadores en realidad el problema para nosotros era distribuirlo todo.

Así que pensé…  ¿cómo el Rey del Pop podría ayudarnos significativamente? Yo no le podía pedir que jugara con los niños a Palayok o pabitin, ya que podía llegar a ser acosado!
Como el evento anual se basa en dar, reuní todo mi valor y le dije al asistente de Michael que lo mejor que podía hacer era estar allí para ayudar a distribuir los regalos, firmar autógrafos y posar con los niños para fotografías. “Wow, esto no va a ser fácil. Usted habla de una distribución de regalos a 300 niños y ya me imagino el caos que reinará. Ya veremos. Ya vuelvo”, dijo.

Llegó la hora del almuerzo y fue lo más apresurado que he hecho en toda mi vida. Después de cinco horas el asistente de Michael regresó y dijo: “Michael está más que feliz de hacer lo que usted sugiere. Que haremos por la mañana”

Quería gritar. Tenía que calmarme y recuperar la compostura, como Lizzie Maguire me dije a mi misma: “Se realista, de nuevo al enfoque”.

Estuvimos de acuerdo en que Michael se uniría después de que se terminara el  programa de juegos, música y aperitivos, y en la última parte él entregué los regalos. Mi colega Annette y el jefe Dulce Agnir solicitaron seguridad adicional para el jardín y la zona del escenario, porque habíamos decidido repartir los regalos allí.  Nos aseguramos de que los niños formarían una fila ordenada.

Así que llegó el momento. Fue en los jardines de Champagne, el 7 de diciembre de 1996. Me sorprendí al verlo caminar hacia nosotros, guiado por su asistente. Michael vino hacia mí, porque tenía que informarle de los avances.


“Hola, ¿cómo estás? Gracias por dejarme participar, yo sé que vine temprano porque no quería perderme el programa.”

Le dije: “¿Estás bromeando? ¡Gracias por ser voluntario! Así que Michael, ¿por qué no te sientas aquí y ves el espectáculo antes de distribuir los regalos? Voy a tener que ajustar un poco el programa.”

Él respondió:
“Claro, lo que digas… (iso una pausa para ver mi nombre en mi identificatorio) Gwen!”

Me quedé sorprendida por la forma en que era increíblemente amable y modesto. Y pensé: “¡Oh Dios mío, esto no está sucediendo realmente!”

Es increíble como él se sentó a observar pacientemente todo el programa. Carol Banawa, no podía creer que MJ estuviera viendo su actuación. Ella tenía su vestido rojo firmado por él justo después de su show. Luego siguió Stefano Mori con un número de baile. Más tarde, sus coristas y bailarines subieron al escenario seguido de los niños seleccionados de diferentes orfanatos que bailaban al ritmo de Billie Jean. La sonrisa en el rostro de Michael era simplemente increíble.

Luego se anunció que Michael iba a repartir los regalos en la tarima. Le expliqué que había regalos para los niños más pequeños y otra para los más grandes y él asintió. La emoción de los niños era increíblemente conmovedora.  Fue durante la distribución de regalos que tuve una idea de MJ, no como un artista sino como persona.


Estaba con nosotros Santa Claus (David Endriga, amigo de Francisco Capistrano, mi colega). El calor era insoportable y yo estaba preocupada de que Michael sintiera demasiado calor, con su traje de manga larga y el sombrero.

“¿Estás bien Michael? Puedes tomar un descanso”, le pregunté.

Él dijo: “Estoy bien, Gwen. Imagínense cómo se siente Santa Claus en su traje de terciopelo y la barba. Estaremos bien…”

Nunca le oí quejarse o decir una palabra sobre el calor o lo larga que era la fila de los niños. Tenía una forma hermosa. Él ni siquiera pidió algo para beber o una toalla para secarse el sudor, pero uno de nuestros empleados se aseguró de que tuviera un zumo de naranja fresco.

Pasó una hora y estábamos en el medio de la repartición de regalos cuando nos dimos cuenta que el jardín estaba lleno. De repente, estaban los medios de comunicación, políticos, funcionarios e invitados, incluyendo una recepción de bodas que se acercaron dejando a los recién casados, ​​sólo para venir a ver al Rey del Pop.

“Oh, esto no fue planeado, lo siento”, le dije,

“Todo está bien, ya vamos a terminar”, dijo Michael, sonriendo. Cuando acabábamos de entregar la última bolsa de regalo a un pequeño huérfano de 11 años, entonces una nueva fila de niños y adultos tomo forma. El guardaespaldas de Michael, Wayne dijo: “Debemos irnos ahora.”

Michael respondió con calma: “No podemos irnos cuando todavía hay gente esperando. Es Navidad, hombre.”

Sentí que mi corazón latía más rápido y se me erizaron los brazos y mi nuca. No sólo era el artista más electrizante, sino la persona más generosa.


Uno de los momentos más memorables fue cuando una señora se le acercó para pedirle un autógrafo. Riendo y sosteniendo su estómago, dijo, “Hey Gwen, tienes que ver esto”, susurró. “Es un cheque en blanco. La señora me hizo firmar un cheque en blanco.”

Nos reímos mucho, pero no fue la única situación cómica. Más tarde, él me mostró y Wayne otras cosas que las personas usaron o recogían del suelo cuando no encontraban un papel para que firmara. Una señora le hizo firmar en la parte posterior de su vestido elegante de diseñador filipino. Un adolescente se acercó a él sosteniendo una hoja seca y otra, un globo explotando en el acto. Imagínese cómo nos reímos.

Fue una experiencia increíble. En un momento, él me preguntó si me gustaría asistir a su concierto HIStory y me dijo: “Mañana por la noche.”

“¡Oh, te va a encantar!” Michael me dijo.

En un momento, él estaba preocupado por la tarima, porque los adultos superaron a los niños. Su rostro reflejaba nerviosismo, pero él no se quejó. Golpeó el suelo de madera con sus pies varias veces asegurándose de que el escenario era lo suficientemente fuerte como para no desmoronarse. “He experimentado el colapso de un escenario y sólo quiero para asegurarse de que todos estamos a salvo aquí”, explicó.

Una parte de mí quería que, ya se terminara la cola porque estábamos literalmente derritiéndonos bajo el calor y estábamos preocupados por nuestra seguridad, pero la otra parte no quería que se acabara porque sabía que una vez finalizara la cola, Michael se iría.

Pero el final llegó. Me las arreglé para conseguir un autógrafo para mis hermanas, el gerente general, Clem Pablo, le invito a cantar “Give Love on Christmas Day”.

Cesar Sarino, uno de los directores de hotel, agradeció al Rey del Pop. Entonces los guardaespaldas y asistente de Michael lo sacaron del escenario. Pensé: “¡Oh, no, ni siquiera he tenido la oportunidad de decir adiós!”.

De repente, vi a Michael de vuelta en el escenario y me dijo: “Gracias a usted y a su equipo, Gwen. Realmente significó mucho.” Luego me llevó aparte y me dijo: “Nos vemos en el concierto”.


(...) Estos dos increíbles actos del Rey del Pop - voluntario para una organización de caridad y dar generosamente de su tiempo para los pobres. Será para siempre la manera en la que recuerde a este hombre.



Fuente: Newsflash


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