“La noche del 18 de marzo de
2007 se quedará grabada en mi memoria para siempre… Estaba tocando como cada
domingo por la noche en el hotel Dorchester de Londres cuando, alrededor de las
21.30, llegó personal de seguridad y alejó a los clientes que había alrededor
del piano y comenzó a acordonar la zona.
Me pidieron que continuara
tocando y para mi asombro, “el único y exclusivo” Michael Jackson se acercó y
se sentó cerca del piano acompañado de dos amigos.
Me llevó un rato reponerme de
la sorpresa, para entonces Michael se había presentado él mismo y a sus amigos
como el hijo y la hija del Sultán de Brunei.
Michael me preguntó mi nombre
y me dijo que le gustaría que tocara algunas canciones. Y así empezó la noche
más memorable de mi carrera.
Michael y sus amigos pidieron
unas 25 canciones de variados artistas, incluidos Elton John, Billy Joel, The
Beatles, The Carpenters y Stevie Wonders, y para mi sorpresa Michael las cantó
todas.
Su voz era genial y me
felicitó muchas veces durante nuestra sesión diciendo cosas como “Tienes un
verdadero talento” y “Gracias por compartir tu talento conmigo”.
Michael hablaba dulcemente y
fue extremadamente amable diciendo cuánto había disfrutado esa noche y que
esperaba verme de nuevo algún día. Para mí fue una experiencia increíble pasar
una hora en compañía del que podría decirse que era la persona más famosa del
mundo y que no olvidaré jamás”.
Fuente: Danielmills
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